Mi fascinio, mi deseo, mi seducción, mi sentir te pertenece.

Desnuda como universo, como fragua se hace cristalina
Sutil y transparente, frágil al desgranar del porque, de su esencia
Una flor cubierta de luz, abrazando la vida que escasamente reposa en mis manos
El leve toque de la libertad de verdades a medio murmurar,
Sentidas en un abrazo que se pide al pie de oreja, en una entrega plena
Sonido del viento frente al mundo que despierta en cada amanecer
Miedo a la partida sin retorno, ante el silencio de tus palabras
Menguar del tiempo frase escrita en la orilla de una playa
Donde las olas borraron mi estancia, sentada a la espera de tu recalada
Voy mitigando este deseo en los sueños que mantienen viva
el aura que nos ciñó en un solo sentimiento.
Soy aquella rosa que cubriste con el manto de estrellas en un soplo
Y que levantaste sutil en el toque de tu presencia como velo que cubre la noche despertando en los luceros que miras distante evocando mi piel
En el murmullo del seducir, del fascino, del gustar, desear, amar.