Merece ser Dicho nuevamente....

Como decir no a la esperanza...
El estreno de un espectáculo dedicado al día de la Madre, ejecutado por la escuela de Danzas Nacionalistas Ballet Folklórico "Expresión Libre " dirigida por Jesús Blanco, además de deleitarme, como cada interpretación, por demás decir que excelente, me enseño que la vida que queremos vivr, sólo nosotros podemos ser sus autores.
Somos los guionistas, protagonistas, heroés o antetipos, pues dejar en manos de la providencia las sendas de nuestros caminos, es como menospreciar la misma creación.
Walter, un niño, que me cautivo el corazón desde el primer instante, cuando se presento en el colegio, durante las conmemoraciones de la Semana de la Cultura. Sus limitaciones, no son barreras que impidan brillar en el escenario, y su mayor encanto es la humildad, la enteresa, y todo el amor y pasión que desde su corazón imprime en su rol muy protagonico, pues desde que sale a escena el amor de un publico, le hace brillar los ojos con los destellos de la misma divinidad e inocencia.
Jesús, un talento inato, un bailarin profesional, que pudiera brillar en otros escenarios, pero al igual que Walter, la humildad, y un sueño muy particular, y una raiz venezolanista impregnada talvez por el carisma de uno de los mayores emblemas de Venezuela, Yolanda Moreno, le hizo junto a otros sueños, crear y dar forma a lo que con mucho esfuerzo nacio hace algunos años, y sólo ahora les fue posible homenajear, no solo a las Madres, sino a todos aquellos talentos que dan vida a la Escuela de Danza "Expresión Libre".
LA VIDA, es sólo el resultado de nuestras acciones, nuestro libre albedrío es la libertad divina que nos permite alcanzar el sueño mas alto, o quedarnos de brazos cruzados contemplando el brillo de otras estrellas.
La constancia, la unidad, la excelencia, la entereza, el compañerimos, la hermandad, el esfuerzo, el trabajo en equipo, son atributos que exaltan la obra de esta escuela, y de cuantos en ella existen.
Ojala, esta obra pudiera tener toda la ayuda necesaria, para abrazar a todos aquellos niños talentosos, a todos aquellos padres que ante la unidad hacen un gran esfuerzo por estar y apoyar a sus hijos, no sólo una vez al año, sino que se les brindara todas las herramientas necesrias, para que Jesús y su equipo sigan impregnando en los corazones de esos niños el verdadero sentido de pertenencia y orgullo de ser Venezolano.
Ese color tricolor, que fue telón culminante a la hora de la clausura se vio magnificado ante el brillo de las estrella, que con una sonrisa dijeron hasta pronto a quienes tuvimos el honor de estar junto a ellos.
Y a Walter el agradecimiento especial, pues me enseñaste que vasta desear y querer para abrazar la vida que deseamos tener. Y que solo nosotros ponemos la barrera para no alcanzar nuestra estrella.

Felicitaciones
Letty